Vetan en Arizona ley antimigrante

La SB 1231, fue vetada por la gobernadora del estado de Arizona Katie Hobbs

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Nogales, Son

Este lunes la conocida como ley anti inmigrante o SB 1231, fue vetada por la gobernadora del estado de Arizona Katie Hobbs, misma que consistía en que las medidas que se toman en contra de la migración ilegal a los Estados Unidos, se convirtieran en problemas estatales, lo que hubiera dado facultad a las policías de locales y por entidad, detener, arrestar y procesar a personas en la frontera.

Considerada como una nueva formulación de la controversial SB 1070, la cual era mejor conocida como Ley del Odio, daba la facilidad a los agentes del orden de detener a cualquier persona, que pudiera parecer un indocumentado e inclusive ponía en riesgo a todos los residentes legales de Arizona, que por su color de piel o apariencia, fueran detenidos y no contarán con sus documentos listos, ya que en sí el no tener identificaciones era considerado un delito, afortunadamente esta fue suspendida por la juez de Phoenix Susan Bolton un mes después de su entrada en vigor en junio de 2010 y derogada completamente por petición del presidente Barack Obama en 2011.

https://twitter.com/GovernorHobbs/status/1764834807295676486

Por su parte la SB 1231, propuesta por la legisladora republicana Janae Shamp, describía que cualquier persona que no cruzará de manera legal por un puerto fronterizo de Arizona, incurriría en un delito estatal, a diferencia de como actualmente se procesa, es decir en el ámbito federal, lo que, a su vez, proporcionaría inmunidad civil a los agentes locales, por daños derivados de acciones tomadas dentro del cumplimiento de esta ley, poniéndolo en contexto, por detener migrantes.

Dentro de esta propuesta, el legislador David Gowan, quien ayudó a formular este documento, argumentó en conferencia de prensa a finales de enero de este 2024, que esta ley se trataba de una medida que consideró necesaria para preservar la paz pública, la salud y la seguridad de los arizonenses, moción que era respaldada por los 12 miembros del congreso de este estado, todos ellos republicanos.

Activistas de Arizona, en contra de esta medida caracterizaban esta ley como una SB 1070 2.0, ya que abriría la puerta a la discriminación racial, además de que el impacto económico que esto significaría para los comercios sobre aquellos cercanos a las fronteras, ya que muchos ciudadanos tendrían temor que solo por su apariencia, pudieran ser detenidos por las autoridades estadounidenses de todos los niveles.

Mediante un comunicado la oficina de la gobernadora de Arizona Katie Hobbs, se indicó que la mandataría expresó que este tipo de legislaciones no tienen cabida en el estado que lidera, además de que caracterizó la medida como una carga innecesaria para el personal que cumple con las labores de seguridad, así como que de aprobarse podría generar un golpe incuantificable a las comunidades, decisión por la cual agrupaciones a favor de los derechos de los migrantes, aplaudieron el veto de la representante estatal.

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