Vigilancia remota, radares, detectores de movimiento, cámaras, drones y otras tecnologías son empleadas a lo largo de la frontera de Estados Unidos con México para frenar el cruce ilegal de personas.
Sin embargo, pese a toda esa tecnología hay quienes logran cruzar por zonas remotas del desierto y la montaña, con todo lo que puedan cargar en una mochila a sus espaldas. Se adentran en el desierto con falsa información de los “coyotes”, como si el calzado ‘anti huellas’ y la ropa camuflada fueran garantía de no ser detectados.
Gustavo Soto, Jefe del Programa Migrante Desaparecido del Sector Tucson comentó:
Aquí vamos a llegar a Phoenix, pues en cuantos días, en unos dos días llegamos, no te preocupes, lleva a dos o tres galones de agua….Después de cinco días no han avanzado más de 20 a 30 kilómetros. Ya cansados, lesionados con hambre. Eso es una receta completa para una tragedia y es lo que les están vendiendo.Sin un dato concreto sobre cuántas personas logran cruzar sin ser detectadas, sí tienen conocimiento del número de migrantes que son rescatados, tan solo en el Sector Tucson en año fiscal 2023 se presentaron 10,119 casos, y en lo que va de este año fiscal, que comprende de octubre de 2023 a la fecha, suman 533.
En lo que va del presente año fiscal, 347,701 personas han sido detectas cruzando ilegalmente por este sector, uno de los más peligrosos, por las condiciones del terreno y el calor que se resiente. Un aumento considerable comparado con el año fiscal anterior, cuando se detectaron 152,407 personas.
Actualmente por este sector atraviesan migrantes originarios de México, Guatemala, Ecuador, Colombia y El Salvador.
El Jefe del Programa Migrante Desaparecido explica que una de las herramientas más eficaces para poder rescatar a los migrantes son las 34 torres de auxilio distribuidas a lo largo del sector, hasta donde llegan los caminantes ya sin fuerzas para pedir ayuda.
Además agregó que:
Como pueden ver aquí en donde estamos, la torre de rescate tiene dos mecanismos para poder ver qué es lo que está ocurriendo: Una cámara, ahorita está transmitiendo imágenes a nuestros centros de operaciones, quién se ha acercado a la torre. La torre es muy simple en el diseño que tiene, un botón rojo. Para los que no puedan hablar el idioma que está listado aquí, es muy simple: Acércate, oprime el botón, va a mandar una señal, siéntate, va a venir una gente, va a venir una persona para darte auxilio.El agente de la Patrulla Fronteriza destacó que la torre tiene indicaciones en tres idiomas: Inglés, español y lengua O'otam (pápago). Y hay una luz azul en lo alto de la estructura que significa una oportunidad de vida. Esa luz puede verse por varios kilómetros y los migrantes saben de su existencia, porque los propios “coyotes” les dicen y también se les informa en los albergues del lado mexicano.
Cuando estos migrantes piden auxilio, los centros de comando enviarán la ayuda necesaria. Los agentes más próximos responderán, ya sea por la vía terrestre o aérea.
En estas tareas de rescate participa la Border Patrol Search, Trauma, and Rescue (BORSTAR por sus siglas en inglés), cuyos elementos despliegan los operativos de búsqueda y rescate en especial por las zonas remotas y de difícil acceso.
Agentes caninos complementan las labores de búsqueda y son elementos clave para localizar a las personas que claman por ayuda.
Las torres de auxilio están distribuidas a lo largo de los nueve sectores que resguarda la Patrulla Fronteriza y son una oportunidad de vivir.
Además de contar con esta ardua labor de rescate, los migrantes pueden salvar su vida gracias a pequeños “oasis” que brindan grupos de ayuda humanitaria, que mañana abordaremos en la siguiente emisión de esta serie de reportajes especiales.