Papa León XIV genera expectativas en Arizona por su visión migrante

Este domingo se llevará a cabo su misa inaugural, un evento que será seguido con atención por millones de personas alrededor del mundo. Pero más allá del protocolo religioso, la figura del Papa León XIV, originario de Chicago, ya está generando un debate en Estados Unidos, específicamente en Arizona.
Joe Rubio, director de la Arizona Interfaith Network, destaca la importancia de la experiencia del nuevo Papa: “Al conocer más sobre el Papa León, vemos a alguien que comprende el contexto estadounidense y latinoamericano.” Su pasado como misionero en Perú, luego de su ordenación sacerdotal en 1982, y su origen familiar, le ofrecen una perspectiva única sobre la realidad de los migrantes.
Líderes del Valley Interfaith Project (VIP) comparten esta visión. Padre Bob Fambrini, SJ, párroco de la Iglesia Católica de San Francisco Javier y líder del VIP, señala: “Desde sus padres y abuelos, ha experimentado lo que significa ser inmigrante. Creo que podría ser un líder poderoso en este tema.” Monica Dorcey, otra líder del VIP, coincide en esta expectativa.
Según 19thnews.org, el Papa Leo parece estar alineado con las posturas del Papa Francisco sobre los derechos de los inmigrantes y migrantes. De hecho, miembros del VIP tuvieron la oportunidad de dialogar directamente con el Papa Francisco sobre este tema: “Pasamos una hora y media con él en un círculo, teniendo una conversación fluida sobre nuestro trabajo, sobre las comunidades donde estamos, tanto en la frontera como en áreas metropolitanas,” recuerda Rubio.
El encuentro entre el Papa León XIV y el presidente Trump sobre la inmigración también es un punto de atención. El presidente Trump, según Fox News, se mostró abierto a un encuentro. Para los líderes del VIP, esta reunión es crucial: “Predica mucho sobre cómo ganó el voto católico. Sería bueno si entendiera y abrazara lo que enseña la Iglesia Católica,” afirma Fambrini.
La experiencia del Papa León XIV en Perú, su ascendencia familiar y sus posibles acuerdos con las posturas del Papa Francisco, abren un espacio de esperanza para los grupos de apoyo a inmigrantes en Arizona y más allá. Su papel en el futuro de la política migratoria estadounidense se perfila como un tema a seguir de cerca.