Masiva protesta 'No Kings' convoca a cientos en Arizona

El epicentro de esta movilización ciudadana se centra en la figura del presidente Donald Trump, coincidiendo curiosamente con el 250 aniversario del Ejército y su cumpleaños número 79. En Chandler, Arizona, por ejemplo, cientos de manifestantes ondean pancartas y banderas, expresando su descontento con las políticas de la administración Trump. Las imágenes que llegan de diferentes puntos del Valle muestran una significativa participación ciudadana.
Estas protestas, bautizadas como "No Kings" (No Reyes), se enmarcan dentro de una ola de manifestaciones a nivel nacional, desencadenadas por las recientes redadas de inmigración y la decisión del presidente Trump de desplegar tropas de la Guardia Nacional en Los Ángeles, donde se registraron enfrentamientos violentos entre manifestantes y fuerzas del orden. Gobernadores demócratas han denunciado este despliegue como un "alarmante abuso de poder", mientras que sus homólogos republicanos en Virginia, Texas, Nebraska y Missouri están movilizando a la Guardia Nacional para controlar las protestas, advirtiendo de "tolerancia cero" a la violencia.
La iniciativa "No Kings", impulsada por el Movimiento 50501 (50 estados, 50 protestas, un movimiento), busca defender la democracia y contrarrestar lo que consideran acciones autoritarias de la administración. El nombre del movimiento mismo revela la ambición de una movilización a gran escala.
La elección del sábado como fecha para las protestas no es casual. Además de coincidir con el aniversario del Ejército y el cumpleaños de Trump, también se busca contraponerse a un multimillonario desfile militar planeado por el Presidente, cuyo costo se estima entre 25 y 45 millones de dólares y se espera atraiga a 200,000 personas. "La bandera no le pertenece al presidente Trump. Nos pertenece a nosotros," declara la página web de "No Kings".
Se esperan manifestaciones en casi 2,000 localidades a lo largo del país, abarcando desde grandes ciudades hasta pequeños pueblos. Los organizadores prevén una participación masiva, con una convocatoria a la acción no violenta. El mensaje es claro: rechazo al autoritarismo, a las políticas que favorecen a los multimillonarios y a la militarización de la democracia estadounidense.
La magnitud de la movilización, que se espera supere a cualquier otra desde el regreso de Trump al poder, hace que la jornada de este sábado se presente como un punto clave en la compleja situación política del país.