Agentes de la Patrulla Fronteriza arrestados en medio de reclutamiento masivo

El primer caso involucra a Bart Yager, agente con base en Arizona, acusado de 17 delitos graves, incluido tráfico sexual infantil. El segundo, Isaiah Hodgson, fue detenido en Long Beach tras supuestamente ingresar al baño de mujeres de un restaurante y portar un arma de fuego al alcance de la vista. Según la fiscalía local, Hodgson se resistió al arresto y enfrenta cargos por agresión a oficiales.

"Cuando duplicas el tamaño de una agencia en poco tiempo, los estándares se relajan y los problemas aumentan", advierte Noah Schramm, estratega de la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU). Schramm recuerda lo ocurrido durante el gobierno de George W. Bush, cuando la rápida expansión de la Patrulla Fronteriza derivó en más casos de corrupción y vínculos con el crimen organizado.

El DHS asegura que su proceso de selección incluye:

• Verificaciones exhaustivas de antecedentes
• Pruebas de detección de drogas
• Evaluaciones psicológicas

Sin embargo, las dudas persisten. Con redadas migratorias en curso, la ACLU teme que la prisa por contratar derive en agentes menos calificados y con "actitudes más duras hacia las comunidades migrantes", según Schramm. El contexto no ayuda: el discurso antiinmigrante de la actual administración podría, según los críticos, filtrarse en las nuevas contrataciones.

Mientras el DHS investiga el incidente de California, las organizaciones civiles piden transparencia en los procesos de selección. El debate sobre el equilibrio entre seguridad fronteriza y derechos civiles parece lejos de resolverse, especialmente cuando las cifras de contratación se miden en miles y los plazos en meses.

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