Incendio White Sage arrasa 58,842 acres en Coconino, Arizona; bomberos luchan por contenerlo

"La humedad nos dio un respiro", admitió Jesse Trembly, jefe adjunto de operaciones del BLM, durante el último reporte. 179,597 galones de retardante cayeron desde aviones la semana pasada, una cortina química para frenar el avance hacia el sur, donde las llamas cruzaron la autopista 89A como un animal sin correa.

• Zonas críticas: El perímetro noroeste muestra progreso, pero el flanco sur sigue activo, alimentado por maleza seca y vientos erráticos.
• Infraestructura perdida: A 50 km de allí, el incendio Dragon Bravo redujo a cenizas 70 estructuras en el borde norte del Gran Cañón, incluyendo el histórico Grand Canyon Lodge, centro de visitantes y una planta de tratamiento de agua cuya quema liberó gas cloro.

La carretera US 89A permanece cerrada en ambos sentidos, estrangulando el tránsito entre Fredonia y Bitter Springs. 467 bomberos, varios de ellos voluntarios de comunidades navajo, trabajan en turnos extenuantes bajo temperaturas que rozan los 38°C. Mientras, los residentes de Marble Canyon reportan un olor acre que persiste a kilómetros de distancia.

El Parque Nacional confirmó el cierre indefinido del acceso al North Rim, cancelando reservas de alojamiento y excursiones fluviales. "Phantom Ranch ya no es un punto seguro", alertó el Servicio de Parques, ordenando a los grupos de rafting evitar la zona. Los senderos North Kaibab y South Kaibab, usualmente repletos de mochileros en julio, ahora son cicatrices negras en el mapa.

---