NUEVA YORK, NY
La votación al Salón de la Fama no tuvo entronizados.
Hay que mantener a los tramposos fuera de nuestro club.
Ese fue el sentimiento prevaleciente entre varios miembros del Salón de la Fama del béisbol, al expresarse contentos de ver que Barry Bonds, Roger Clemens y el dominicano Sammy Sosa fueron excluidos el miércoles de la selecta hermandad de Cooperstown.
“Estoy algo contento de que nadie ingresó este año”, dijo el ex jardinero de los Tigres de Detroit Al Kaline. “Me siento honrado de estar en el Salón de la Fama. Y me hubiera sentido un poco incómodo de estar ahí sentado en el escenario, escuchando a algunos de estos tipos nuevos hablando sobre lo grandioso que fueron”.
Richard “Goose” Gossage fue aún más lejos, como es usual en él.
“Pienso que la gente de los esteroides y que está bajo sospecha obtuvieron demasiados votos”, señaló el ex relevista. “No sé porqué se hace tanta controversia con esto y porqué hay tanto debate. Para mí, ellos hicieron trampa. ¿Vamos a recompensar a estos tipos?”.
Al menos no este año.
Los periodistas no eligieron este año a nadie para ser honrado con su ingreso al Salón de la Fama, siendo la segunda vez que ocurre en 42 años. Entre los rechazados estuvieron el trío de astros manchados por uso de esteroides Bonds, Clemens y Sosa, todos elegibles por primera vez.
Bonds recibió apenas 36,2% de los votos y Clemens 37,6% en resultados anunciados por el Salón y la Asociación de Escritores de Béisbol de América, en ambos casos muy por debajo del 75% requerido para ser elegidos, pero para el gusto de Gossage demasiado cerca. Sosa, octavo en la lista de cuadrangulares de todos los tiempos, obtuvo 12,5%.