MÉXICO, DF
El mexicano salva dos claras de gol, una de ellas en un mano a mano con Ibrahimovic.
Con el arquero mexicano Guillermo Ochoa como pieza fundamental del “robo” y con una sólida actuación a la defensa, el Ajaccio salió vivo del Parque de los Príncipes y le logró sacar un punto que supo a victoria al “todopoderoso” PSG, que con el empate puso en riesgo su etiqueta de líder de la Liga francesa de futbol.
El modesto equipo de Córcega se presentó como víctima, pero terminó como un auténtico dolor de cabeza para Zlatan Ibrahimovic y compañía gracias a la gran noche que tuvo Memo Ochoa bajo los tres palos y a las atinadas intervenciones de gente como Poulard, Bouhours, Saad y Maire.
Y es que el equipo de Ancelotti, con todo y su nuevo refuerzo millonario Lucas, lo intentó, pero la mala suerte los persiguió toda la noche.
El PSG apretó desde el inicio y al 12’ mandó el primer aviso de la tarde para el arquero mexicano. Thiago Motta sacó cañonazo cruzado que pasó a centímetros del poste. El lamento del brasileño sería el primero de muchos ante la afición parisina.
Sólo dos minutos después, Cristophe Jallet ahogó el grito de gol ante la gran desviada a córner que tuvo Ochoa, quien puede presumir haber mantenido la portería en cero en 180 minutos jugados ante el cuadro de la capital.
Fue un monólogo la primera parte del encuentro. El Ajaccio resistía como los grandes los embates del enemigo y mostró una fortaleza en la defensa como pocas veces en el campeonato.
La jugada más clara del primer tiempo para el equipo “millonario” la tuvo Ibrahimovic. A pase de Lucas, Zlatan quedó solo frente al marco de Ochoa, quien valiente salió a achicar, pero que al final no fue requerido pues el crack sueco mandó su remate por arriba del travesaño. La frustración se asomaba y dio su peor versión minutos antes del descanso. Ajaccio, en una jugada a contragolpe (su único recurso al ataque) encontró en Sammaritano una opción.