México, DF
En 2008 fue electo All American con los Rebels de Ole Miss.
Michael Oher es el joven huérfano que pasó del anonimato a la fama, gracias a Hollywood, y que hoy está a sólo un juego de ganar el anillo de Super Bowl, instancia a la que llegó tras una serie de peripecias que no aparecen en la película “The Blind Side” (Un sueño posible, título que se le puso en México).
El filme, que llegó a las salas en el año 2009 y obtuvo un Oscar por Mejor Actriz para Sandra Bullock, cuenta una parte de la vida de Oher antes de llegar a la NFL.
Oher nació y vivió su infancia en la zona habitacional Hurt Village del condado de Shelby en Memphis, Tennessee. Sin su madre y su padre -una adicta al “crack” y el otro un asiduo visitante a prisión- rondó entre varias familias adoptivas desde los siete años.
“Miraba alrededor y pensaba ‘debe haber algo mejor allá afuera’”, comentó Oher sobre aquella etapa de su vida en una entrevista con “Usa Today” en 2011.
“Para mí era fácil decir quiero estar con estas personas, drogarme y no ir a la escuela. Pero decidí que no quería hacerlo”
Al no tener un hogar sólido, Oher se convirtió en un blanco fácil para las pandillas de su barrio natal. Sin embargo, el ahora jugador de los Ravens nunca tuvo en mente unirse a alguna de ellas y, a los 13 años, prefirió ganarse la vida como repartidor de periódicos todos los domingos desde las seis de la mañana.
“Para mí era fácil decir quiero estar con estas personas, drogarme y no ir a la escuela. Pero decidí que no quería hacerlo. Quería ser alguien en la vida”, dijo Oher a la cadena ABC en 2009, año en que fue elegido en el Draft de la NFL por Baltimore.