MESA, Az
El proyecto de Theo Epstein aún es joven, pero debe mejorar
La pregunta es terca. ¿Cuándo empezarán a verse los resultados del proyecto de Theo Epstein en Wrigley Field?
Ni los propios Cachorros de Chicago lo saben con precisión.
“No va ocurrir de la noche a la mañana”, dijo el dueño Tom Ricketts. “Hay que pensar a largo plazo. Creemos que vamos por el rumbo correcto... Realmente creo que tenemos a la gente más hábil armando un equipo campeón. Sólo que toma tiempo”.
Por razones sobradas, se entiende la impaciencia en Chicago. Los Cachorros vienen de perder 101 juegos la pasada temporada, no van a los playoffs desde 2008 y su último campeonato de Serie Mundial se remonta a 1908.
Como gerente de los Medias Rojas de Boston, Epstein fue el gestor de los cambios que pusieron fin a otra larga sequía de títulos. Boston salió campeón en 2004 y 2007 tras esperar 85 años.
Epstein ostenta el puesto de presidente de operaciones de béisbol en Chicago y está tratando de calcar la misma ruta, incluyendo una renovación de las instalaciones del vetusto Wrigley Field como se hizo en Fenway Park.
Los Cachorros también quieren emular en el terreno de juego lo que los Medias Rojas hicieron cuando Epstein estaba al frente de ese equipo.
Por lo pronto, lo más razonable, es progresar marginalmente tras su peor campaña en casi 50 años.
Cuando Epstein empezó sus tareas en Boston, al menos ya contaba con gente como Pedro Martínez y Manny Ramírez en la nómina. En Chicago, en cambio, comenzó prácticamente de cero y constreñido por algunos contratos desfavorables, en particular el de 137 millones de dólares por ocho años que el jardinero Alfonso Soriano firmó previo a 2007.
El torpedero dominicano Starlin Castro y el inicialista Anthony Rizzo son las únicas piezas útiles que encontró para un futuro a largo plazo, y con el intermedista Darwin Barney como un jugador prometedor.
En un lapso de un año, Epstein y su lugarteniente Jed Hoyer han ido perfilado la base de un equipo que sería competitivo por buen tiempo.
Con los derechos Matt Garza y Jeff Samardzija al frente, la rotación de abridores constituye la fortaleza del equipo. Hay algo de duda con respecto a Garza debido a una dolencia en el costado.
Edwin Jackson y Scott Feldman, otro par de derechos, fueron contratados como agentes libres. Jackson debutará con su octavo equipo en 11 años, luego de firmar un pacto de 52 millones de dólares por cuatro campañas.
“Creo que le caigo bien a todos”, respondió Jackson a una pregunta sobre su condición de trotamundos.