MIAMI, Fla
Jugadores minimizan alcanzar la marca de triunfos seguidos.
Para el Heat de Miami lograr romper la máxima racha ganadora de la NBA impuesta por los Lakers de Los Angeles de 33 juegos de 1972 no significaría nada si no logran el título.
Ante el paso impresionante de los campeones, que llevan 26 victorias seguidas y están a sólo ocho de romper el récord, algunos especialistas especulan que seria incluso un mayor logro romper esa marca de cuatro décadas, que lograr el mismo título.
Pero para el centro Chris Bosh la racha ganadora no es nada sin el campeonato. “Ni pensarlo prefiero el título todo el tiempo... uno no obtiene un anillo (de campeón) por ganar 34 partidos consecutivos”, dijo el espigado jugador.
“Uno logra un récord que probablemente algún día sea quebrado, porque para eso son los récords para romperlos, pero los títulos son para todo la vida”, agregó.
Mientras más se acercan a la marca, la racha ganadora del Heat ha llamado la atención de los especialistas por la forma tan dramática en que han logrado victorias en la última semana. Estaban 17 puntos abajo contra Boston y luego 27 abajo contra Cleveland.
De alguna manera los Heat lograron mantenerse con vida en ambas ocasiones, y ahora algunos los llaman el equipo “milagro”.
La estrella Dwayne Wade descartó que sean un equipo milagroso y dijo que simplemente hacen su juego y se divierten, mientras que Lebron James señaló que al sobreponerse a esos déficits demuestra que el equipo “puede funcionar como una máquina.
Ambos jugadores han comentado en las redes sociales que sus familiares incluso les piden no hacer los juegos tan cardiacos.