MEXICO, DF
Pese a la derrota, ‘Chepo’ de la Torre se defiende con el Tri a dos puntos del líder.
Embriagado de confianza por un exitoso 2012, el técnico de México comenzó este año hablando de alcanzar la final de la Copa Confederaciones. Tan sólo tres meses después, la selección dirigida por José Manuel De la Torre recibió una cachetada de realidad y es penúltima en el hexagonal final de la Concacaf.
México empató 0-0 con Estados Unidos el martes por la noche y se quedó con tres puntos en igual número de partidos para ocupar la penúltima plaza entre los seis equipos que participan en la ronda final de la eliminatoria. Si la clasificación a Brasil 2014 se decidiera ahora, el “Tri” estaría fuera del Mundial.
Los tres mejores del hexagonal avanzan directo al Mundial y el cuarto se medirá a Nueva Zelanda en un repechaje por una cuarta plaza.
“Quedan 21 puntos en disputa, el líder lleva cinco puntos, nosotros tenemos tres, está apretado... el colero tiene dos”, dijo el “Chepo” De la Torre. “Por supuesto que no es lo presupuestado, la obligación es ganar en casa y hemos dejado ir puntos”.
En muy poco tiempo, los mexicanos pasaron del sueño que fue ganar su primera medalla de oro unos Juegos Olímpicos y de cumplir una inmaculada ronda en la fase grupal de la Concacaf a la pesadilla que es igualar el peor arranque de una fase final desde que el hexagonal se adoptó como nuevo sistema de clasificación previo a Francia 1998.
Los problemas de México comenzaron con un empate sin goles con Jamaica en el Azteca, luego dejó ir una delantera de dos tantos ante Honduras para igualar 2-2 en San Pedro Sula, y el martes nuevamente sus artilleros anduvieron con la mira destemplada en el empate 0-0 con Estados Unidos.
“Me significa lo mismo (la crisis) que lo que me significó salir invicto del cuadrangular, lo que haya pasado anteriormente es historia”, dijo De la Torre. “Es indudable que existe molestia por no cosechar los puntos que teníamos pensados”.
Con los tres empates, México se encuentra en la misma posición de hace cuatro años, cuando Sven-Goran Eriksson fue cesado por sumar tres puntos luego de tres partidos, aunque el sueco perdió dos y ganó uno.
Pero dos empates consecutivos como locales, algo que no le pasaba a México desde que Estados Unidos y Costa Rica les sacaron igualadas de 0-0 y 3-3 respectivamente, previo a Francia 1998, han provocado un notorio malestar entre los aficionados del Tri, que frustrados pedían el cese del entrenador.
“El público se comportó bien al principio, después no les gustó el resultado y que haya reclamos es normal, lo aceptamos y sabemos que es así”, añadió De la Torre.