Hay cuentas pendientes

SANTA CLARA, Cal.

Halcones Marinos y 49’s se miden en el cierre del Día de Acción de Gracias.
El salto de Richard Sherman para desviar un pase dirigido a Michael Crabtree en la esquina de la zona de anotación fue la jugada que definió el último encuentro por el título de la Conferencia Nacional, y que encaminó a los Halcones Marinos de Seattle hacia la conquista del Super Bowl.
Tras ese desvío, el balón cayó en las manos de Malcolm Smith, para un pase interceptado.
Inmediatamente después, Sherman criticó a Crabtree, a gritos en declaraciones a la televisión, además de hacer una seña a Colin Kaepernick y al banquillo de los 49’s. Ese alarde seguramente sigue fresco en la memoria de los jugadores de San Francisco, que se enfrentan este jueves a sus rivales de la División Oeste.
Será el primero de dos duelos entre 49’s y Halcones Marinos en un lapso de tres semanas. Ambos revisten mucha importancia.
“Fue bueno asegurar aquel partido así”, consideró el defensive end Cliff Avril. “No había mejores personas para conseguir eso que Sherm y Malcolm”.
Primero, Sherman hizo la jugada. Luego, dio una palmada en la espalda a Crabtree y le tendió la mano, al parecer para estrechársela. En respuesta, el receptor le puso la cara en el rostro y lo empujó.
Seattle se impuso por 23-17 en el CenturyLink Field, y luego vino la ruidosa declaración de Sherman.
“Me cercioré de que todos supieran que Crabtree es un receptor mediocre”, dijo. “Y cuando pones a prueba al mejor corner de este deporte contra un receptor mediocre, esto es lo que sucede”.
Sherman fue multado después por conducta antideportiva y provocación.
“Obviamente, uno quería ganar ese partido, pero eso quedó en el pasado”, comentó el quarterback Kaepernick. “Sabemos que hemos pasado antes por esto.

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