Aún lo creo, los Cuervos de Baltimore son mejor equipo que los Titanes de Tennessee. Las extrañezas del juego los han llevado a perder dos años seguidos en casa en playoffs y contra conjuntos que no parecían ser ni cercanos a su nivel.
Ya lo sé, no se me arremoline. Por algo los Titanes dejaron en el camino a los Cuervos en la semifinal de la AFC en enero pasado en su mismo estadio, pero aún creo que se trató una de esas extrañezas que ocurren en la NFL.
Por varios años, los Cargadores, aún en San Diego, cuando parecían ser una máquina de ganar juegos, fueron eliminados en casa en la primera década del siglo que corre, con todo y Philip Rivers en el equipo. Drew Brees era el mariscal titular en el juego divisional que perdieron ante los Jets (sí, los Jets) en tiempo extra en 2010.
Los Cuervos corren ese riesgo, de ser un equipo que avasalla en el rol y se desploma en postemporada, la presión crece y para mi no hay duda, hay mariscales de campo que cambian el destino de un entrenador en jefe. John Harbaugh tenía un pie afuera cuando, en 2018, decidió hacer titular a Lamar
Jackson sobre el veterano Joe Flacco y hasta el momento sigue al frente. Bill O’Brien (ya despedido) Bill Belichick, el fallecido Bill Walsh, Jimmy Johnson y
Mike Tomlin me parecen otros ejemplos de este fenómeno.
Pero ahora que Tomlin sale a flote, creo que este domingo, en Baltimore, se acabará el invicto de los Acereros de Pittsburgh que dirige. Curiosamente, aunque Jackson está en su tercera temporada, no ha tenido un juego donde en la banca de enfrente se halle Ben Roethlisberger.
Yo no me creo ese cuento fabricado para vender la transmisión por parte de las cadenas de televisión. ’Es un duelo entre Roethlisberger y Jackson’
No damas y caballeros, el duelo de este domingo en la casa de los Cuervos es entre la ofensiva de Baltimore y la llamada Cortina de Acero. Es ahí donde se decide.
Los Acereros han sido señalados como un equipo que ha enfrentado a puro flan. Antes de vencer a los Titanes la semana pasada y hace dos jornadas a los Cafés de manera convincente, sus rivales acumulan marca de 6-20-1 (Gigantes, Denver, Filadelfia y Houston) Pero los dos recientes suman 10-3 (Tennessee y Cleveland)
Sin secretosComo lo hemos platicado antes, el plan de los equipos que quieran derrotar a los Cuervos y permitir que Jackson y compañía se acaben el Gatorade en la banca y que estén el menor tiempo posible en el campo... sale más fácil escribirlo en una computadora que hacerlo.
No hay secretos, el mundo lo sabe, Jackson es doblemente peligroso dada su habilidad de correr la pelota. Los equipos tratan de poner un jugador especial para contrarrestar eso, pero ya lo hemos visto, no ha funcionado. Es algo que Pittsburgh va intentar para alcanzar su séptima victoria de la campaña, además de que es vital para una posible semana de descanso al fin del rol regular.
¿Cómo? ¿no lo sabía? sólo un equipo, de los siete que avancen en cada conferencia, tendrá receso. Vamos a tener un fin de semana wildcard de seis juegos en lugar de cuatro... y eso ya es de chaleco para las temporadas que vengan post pandemia.
Pittsburgh va requerir ese ataque que ha mostrado en tres semanas recientes cuando han anotado dos veces 38 puntos y 27 en otra ocasión, contra la defensa de los Cuervos que está entre las mejores cinco de la NFL. Antes de dejar el tema, puede levantarse un poco más tarde este domingo, el horario cambia en Estados Unidos y a las 11:00 son las patadas de salida. Muchas gracias.
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