PARÍS, Fra
Iga Swiatek continúa su dominio sobre Coco Gauff y estiró a 20 su racha de victorias en el torneo con la victoria 6-2, 6-4 en la semifinal del jueves y se citó con la italiana Jasmine Paolini el sábado por el título del Abierto de Francia.
Swiatek está en su mejor momento, especialmente en el Abierto de Francia. Ha sido así por un tiempo.
“Por supuesto fue intenso”, aseguró la número uno del mundo, quien ganó cinco de sus últimos seis games tras estar abajo 3-1 en el segundo set. “Estoy contenta de mantener la consistencia con mi táctica y que no pensé todo de más y seguí hasta el final”.
La número uno del mundo intenta conquistar su cuarto campeonato en cinco años en Roland Garros, y convertirse en la primera mujer que encadena tres desde Justine Henin 2005-2007.
Para Paolini (12), una italiana de 28 años que está teniendo la mejor temporada de su carrera tras eliminar a la rusa Mirra Andreeva 6-3 y 6-1 esta será su primera final de Grand Slam.
Nunca había superado la segunda ronda en sus primeras 16 apariciones en majors, hasta que llegó a la cuarta ronda del Abierto de Australia en enero.
Swiatek quedó 11-1 en su historial directo contra Gauff, la tercera cabeza de serie y reinante campeona del US Open. La estrella polaca ha derrotado a la estadounidense en tres ediciones consecutivas del Grand Slam en arcilla, incluyendo la final de 2022 y en los cuartos de final el año pasado.
“Ha avanzado mucho. Lo puedes ver con sus resultados. Por supuesto el U.S. Open del año pasado demostró lo fuerte que es. A su edad es claro que seguirá creciendo. Es lindo ver cómo lidia con todo a su alrededor por que no es fácil”, reconoció Swiatek, quien cumplió 23 años la semana pasada. “Estoy segura que tendremos muchos más duelos intensos, al más alto nivel”.
En cuando a Gauff, seguramente ella preferiría otra rival.
Swiatek exhibe una foja de 4-0 en las finales de los Slams y ha lucido imperial durante las últimas dos semanas.
Salvo un triunfo en sets en la segunda ronda ante Naomi Osaka, campeona de cuatro grandes, y en el que incluso salvó un match point, Swiatek apenas ha cedido 17 juegos en sus otros cinco partidos.
Con sus usuales poderosos, pero limpios tiros de fondo, Swiatek sólo necesitó de 10 tiros ganadores para avanzar, especialmente por que sólo cometió 14 errores no forzados —por 39 de Gauff.
Esto provoca Swiatek en cualquiera que se esté del otro lado de la red, especialmente en arcilla.
Hubo una dinámica similar en la otra semifinal. La estadística clave fue: Paoli salvó los seis puntos de quiebre que enfrentó y cometió sólo 10 errores no forzados por 29 de Andreeva.
“Estaba nerviosa en el primer set”, admitió Paolini, “pero bola a bola me comencé a relajar”.