En medio de este clima de incertidumbre, John Mara, propietario y presidente del equipo, y Steve Tisch, copropietario, han tomado una decisión trascendental. El lunes, Mara emitió un comunicado que sorprendió a más de uno: “Ahora que la temporada ha terminado, sentimos que era necesario hacer esta declaración. Joe Schoen y Brian Daboll continuarán en sus respectivas funciones dentro de la organización.”
La decisión de mantener a Joe Schoen como gerente general y a Brian Daboll como entrenador, a pesar del decepcionante récord de 3-14, se basa en una confianza en el proceso a largo plazo que ambos han implementado. Mara y Tisch apuntaron a una “visión para nuestro equipo” que, a pesar de los malos resultados, consideran sólida y prometedora.
Recordemos que ambos fueron contratados en 2022, y su primer año estuvo lleno de éxitos. Un 9-7-1, la clasificación a los playoffs y la eliminación de Minnesota en la ronda de comodines, dejaron un sabor agridulce luego de la derrota contra Filadelfia en la ronda divisional. Incluso, Daboll fue nombrado Entrenador del Año de la NFL por la AP.
Sin embargo, la temporada 2023 presentó serios retos. Las lesiones y el inconsistente rendimiento de Daniel Jones, a pesar de su costosa extensión de contrato de cuatro años por $160 millones, fueron factores clave en el descalabro. Su bajo desempeño llevó a su relevo del puesto titular, con Tommy DeVito y Drew Lock ocupando su lugar sin conseguir revertir la situación. La decisión de no renovar el contrato de Saquon Barkley también pesa en el balance final.
La frustración de la afición fue evidente, con pancartas aéreas sobre el MetLife Stadium instando a cambios radicales. A pesar de todo esto, Schoen y Daboll afrontarán la próxima temporada. Los próximos meses estarán dedicados a la búsqueda de un quarterback, crucial para el futuro del equipo. Con la tercera selección general en el draft de abril, los Giants tienen una oportunidad clave para replantear su estrategia y afrontar la temporada venidera con renovadas esperanzas, intentando revertir una marca de 0-6 en la división y 1-8 como locales.