Tras una breve, pero intensa, etapa de incertidumbre, generada por la salida de Pascal Jansen la semana pasada, el equipo de Budapest ha anunciado la contratación de un nuevo director técnico. Su nombre, ya conocido en el mundo del balompié: Robbie Keane.
El legendario delantero irlandés, quien acaba de cumplir 44 años, se hará cargo del equipo este martes en un campamento de entrenamiento en España. Una decisión, sin duda, audaz y llena de expectativas. Keane llega a Hungría procedente del Maccabi Tel Aviv, donde se coronó campeón de la liga israelí. Su salida, según reportes internacionales, se vio influenciada por "problemas de seguridad tras los ataques de Hamas."
Pero la trayectoria de Keane va más allá de los títulos como jugador. Su currículum incluye una notable experiencia como asistente técnico en la selección nacional de Irlanda, así como en equipos como el Middlesbrough y el Leeds. Su paso por el mundo del fútbol profesional es un compendio de logros sobresalientes; "146 apariciones y 68 goles con Irlanda, récords nacionales," muestran la magnitud de su legado en el balompié irlandés.
Su carrera como jugador lo llevó a vestir las camisetas de clubes de la talla del Tottenham, el Inter de Milán, el Liverpool, el Leeds y el LA Galaxy, entre otros. Ahora, se enfrenta a un nuevo y emocionante reto: liderar al Ferencváros en la Liga Europa. El debut oficial será el 23 de enero contra el Eintracht Frankfurt. La meta es clara: clasificar entre los 24 mejores de los 36 equipos participantes para acceder a la siguiente fase.
Mientras tanto, el Ferencváros continúa su lucha en la liga doméstica, donde actualmente ocupa la segunda posición, persiguiendo al líder, el Puskas Akademia. El regreso a la competición local está programado para febrero. La llegada de Keane representa una nueva era para el club, cargada de ilusión y la promesa de un fútbol vibrante y competitivo.