La noticia principal gira en torno a la inducción de solo cuatro nuevos miembros: Antonio Gates, Jared Allen, Eric Allen y Sterling Sharpe. Una cifra llamativamente pequeña comparada con las últimas dos décadas. Pero antes de ahondar en los nombres, es importante entender el contexto.
El cambio más significativo radica en las nuevas reglas de votación, implementadas tras una iniciativa de los propios miembros del Salón. Estas reglas, diseñadas para hacer la inducción más exclusiva, modificaron sustancialmente el proceso. Resumiendo los cambios:
- Reducción de candidatos modernos en la etapa final: de 15 a 7.
- Voto de los 49 electores por 5 de los 7 finalistas.
- Necesidad del 80% de votos o estar entre los tres primeros para la inducción.
- Modificaciones similares para las categorías de veteranos, entrenadores y contribuyentes.
Jared Allen, con cuatro nombramientos All-Pro y 136 capturas en su carrera, incluyendo una temporada dominante con 22 capturas en 2011, se une a la selecta lista. Mientras que Eric Allen, un esquinero excepcional durante 14 temporadas, se destaca por su longevidad y consistencia, dejando huella en partidos memorables como el "Fog Bowl" de 1988 y el duelo de la "Regla Tuck" en 2001.
Finalmente, Sterling Sharpe, con una carrera más corta pero igualmente impactante con los Green Bay Packers, ingresa al Salón de la Fama como el primer hermano en unirse a otro miembro entronizado (su hermano Shannon). Su impacto es innegable; en 1992, se convirtió en el sexto jugador en ganar la triple corona de recepciones, estableciendo un récord de la NFL con 108 recepciones para 1.461 yardas y 13 touchdowns. "Uno casi apreció más esto," dijo Jared Allen, reflejando el sentimiento general de un grupo selecto.
Entre los que no lograron ingresar este año, destacan nombres como Eli Manning, quien no pudo unirse a su hermano Peyton en Canton, y otros destacados jugadores que competirán por un lugar en la próxima votación.
La ceremonia de ingreso se llevará a cabo el 2 de agosto.