Tatum brilla; Celtics vencen a 76ers pese a bajas

Esta semana, la imprevisibilidad se hizo presente en un encuentro clave que dejó a más de uno con la boca abierta.
El encuentro entre los Celtics de Boston y los 76ers de Filadelfia, un duelo que prometía ser épico, llegó con una lista de bajas que sorprendió a propios y extraños. La ausencia de figuras clave en ambos equipos, como Joel Embiid (76ers) y Jaylen Brown (Celtics), ya pintaba un panorama diferente al esperado.
A pesar de las ausencias, un jugador brilló con luz propia: Jayson Tatum. Su destacada actuación, con 35 puntos y 7 rebotes, fue decisiva para la victoria de Boston. "Fue un partido complicado, con muchas bajas en ambos equipos, pero logramos mantener la concentración y salir adelante", podría haber dicho Tatum, aunque no tenemos esa cita textual confirmada.
Tatum no solo lideró la ofensiva, sino que logró esta marca impresionante a pesar de permanecer en el banco durante todo el último cuarto. Este fue su vigésimo cuarto partido con al menos 30 puntos esta temporada, una cifra que habla por sí sola de su talento y consistencia. La victoria, por 123-105, fue la novena en los últimos 11 encuentros para los Celtics.
Otros jugadores que contribuyeron al triunfo fueron Payton Pritchard (19 puntos) y Derrick White (12 puntos), quien, incidente curioso, regresó a la cancha en el tercer cuarto después de perder un diente en un codazo accidental en la primera mitad. Por el lado de los 76ers, Kelly Oubre Jr. (27 puntos) y Lonnie Walker IV (17 puntos) intentaron liderar la remontada, pero no fue suficiente.
La lista de bajas fue extensa. Además de los ya mencionados, los Celtics no contaron con Jrue Holiday, Al Horford, Kristaps Porzingis y Sam Hauser, mientras que los 76ers se enfrentaron a la ausencia de Paul George, Eric Gordon, Kyle Lowry, Tyrese Maxey y Jared McCain. Un partido que, más allá del resultado, dejó en evidencia la fragilidad de las plantillas en una temporada exigente.
El partido, en resumen, fue una muestra de la capacidad de adaptación de algunos jugadores y la crueldad de las lesiones en un deporte de alto impacto como la NBA. Un claro ejemplo de cómo la temporada puede cambiar por completo en un instante.