Pochettino: EEUU dominará el fútbol mundial en años

En un panorama competitivo, un país se perfila para convertirse en un jugador clave en las próximas décadas: Estados Unidos.
Mauricio Pochettino, el reconocido entrenador argentino que asumió las riendas de la selección estadounidense en septiembre pasado, ha generado una ola de comentarios con sus audaces predicciones. Su nombramiento, tras la salida de Gregg Berhalter, marca un punto de inflexión para el equipo que se prepara para ser anfitrión del Mundial 2026 junto a Canadá y México.
Pochettino, en una entrevista con medios ingleses, afirmó con rotundidad: “Creo que podemos dominar el fútbol, tal vez en diez o 15 años, o quizás menos: cinco, seis, siete años. El potencial es enorme”. Esta declaración, lejos de ser una simple afirmación optimista, refleja la profunda convicción del técnico sobre el talento y el potencial aún inexplorado del fútbol estadounidense.
La presión, sin embargo, es un factor innegable. El técnico no elude la realidad: “Para nosotros, la presión va a estar ahí porque somos anfitriones”. Pero no se trata solo de la expectativa del público. La presión presidencial también juega un papel significativo. Pochettino reconoce la influencia de Donald Trump, comentando: “Ahora nuestro presidente (Trump) le gusta ejercer presión, pero es bienvenido. Eso significa que vamos a sentir la adrenalina que necesitamos sentir. Estamos listos para rendir”.
Un detalle interesante surge de la interacción entre Trump y el presidente de la FIFA, Gianni Infantino. Durante una visita a la Casa Blanca, Trump le preguntó a Infantino sobre las posibilidades de Estados Unidos en el Mundial. La respuesta de Infantino, según Pochettino, dejó mucho que desear: “Gianni dijo que sí, pero me decepcionó esta respuesta. Debería haber dicho: ‘Necesitas preguntarle a tu gran entrenador, Pochettino’. Porque seguro que él puede dar una mejor opinión”.
La visión de Pochettino trasciende el corto plazo. No se limita a la próxima Copa del Mundo, sino que proyecta un dominio a largo plazo del fútbol estadounidense en el escenario internacional. Su llegada a la selección estadounidense, sumado a las declaraciones y las expectativas generadas, anticipa un cambio significativo en la trayectoria del fútbol norteamericano.