Futuro incierto: Purdy y Kittle, claves en la temporada baja de los 49ers

En el corazón de la bahía de San Francisco, la incertidumbre rodea a dos figuras clave de los 49ers: Brock Purdy y George Kittle. Ambos jugadores se encuentran en un punto crítico de sus carreras, con sus contratos llegando a su fin y la negociación de extensiones en el horizonte. La especulación sobre su presencia en el programa de temporada baja ha mantenido a los aficionados con el aliento suspendido.
Una fuente cercana al equipo confirmó a la Associated Press, bajo condición de anonimato, que Purdy se presentó a las instalaciones el martes, mientras que Kittle decidió mantenerse alejado del programa voluntario. Esta situación recuerda a las complejas negociaciones contractuales que han marcado los últimos años de la franquicia. Recordemos casos como el de Deebo Samuel en 2022, Nick Bosa en 2023 y Brandon Aiyuk el verano pasado, donde las disputas se extendieron hasta bien entrado el verano.
El caso de Purdy es especialmente interesante. Después de su impresionante desempeño en la temporada pasada, donde fue seleccionado para el Pro Bowl, sus expectativas salariales han aumentado considerablemente. A pesar de un salario actual que ronda el millón de dólares al año, su proyección apunta a un contrato que podría superar los 50 millones anuales. Sin embargo, su rendimiento en la temporada pasada, marcada por lesiones y una caída en su índice de pasador, ha añadido un elemento de complejidad a las negociaciones.
Mientras tanto, George Kittle, un pilar fundamental de la ofensiva de los 49ers, enfrenta una situación diferente. Con 31 años y entrando en el último año de un contrato de cinco años y 75 millones, Kittle se encuentra en una posición de fuerza negociadora. El mercado de alas cerradas se ha visto redefinido recientemente con la extensión de Trey McBride por 76 millones, estableciendo un nuevo estándar en el valor anual para este puesto. Con cinco selecciones al equipo All-Pro en ocho temporadas, Kittle ha demostrado su valía, acumulando 538 recepciones para 7,380 yardas y 45 touchdowns.
La confianza en ambos jugadores por parte de la organización, desde el dueño Jed York hasta el entrenador Kyle Shanahan y el gerente general John Lynch, permanece inquebrantable. Pero la espera por un acuerdo continúa, dejando la pregunta sobre el futuro de estas dos estrellas en el aire.