Camavinga y Alaba: bajas sensibles para la final Real Madrid - Barcelona

El triunfo, sí, pero a costa de un precio que podría resultar demasiado alto de cara a los próximos compromisos.
El miércoles, durante el encuentro contra el Getafe, la lesión de David Alaba encendió las alarmas. Aunque el club aún no ha emitido un parte médico detallado, se sabe que el austriaco sufrió una dolencia muscular y realizó entrenamiento diferenciado el jueves. Su participación en la final de Copa, por lo tanto, pende de un hilo.
Pero la situación se complica aún más. La lesión de Eduardo Camavinga es, sin duda, la peor noticia para el Real Madrid. "El jugador francés sufrió una rotura completa del tendón del adductor izquierdo", informó el club el jueves, un golpe durísimo considerando la inminente final de la Copa del Rey contra el Barcelona este sábado en Sevilla.
La gravedad de la lesión de Camavinga es innegable. Su intento de continuar en el campo, a pesar del dolor, mostrando un espíritu de sacrificio encomiable, solo evidencia la dedicación del joven centrocampista. La situación se complicó cuando Ancelotti ya había realizado todos los cambios disponibles, dejando al equipo en una situación crítica. La imagen de Camavinga regresando al suelo con evidentes signos de dolor es un recuerdo que seguramente no se olvidará fácilmente.
El comunicado oficial del Real Madrid se limita a afirmar que Camavinga estará "pendiente de evolución", una frase que, por desgracia, deja poco margen para el optimismo. La final de Copa se perfila como un reto monumental para el equipo merengue, que tendrá que enfrentarse al Barcelona con ausencias clave en su once inicial. Ancelotti, tras el encuentro del miércoles, ya había anticipado la dificultad de contar con ambos jugadores para la final, una predicción que, lamentablemente, se confirma con la gravedad de la lesión de Camavinga. La incertidumbre reina sobre la participación de ambos jugadores y sus recuperaciones.
Más allá de las especulaciones, la recuperación de ambos jugadores será clave para el futuro inmediato del equipo blanco. La temporada aún no termina y, más allá de la final de la Copa, quedan retos importantes por afrontar. La recuperación de Alaba y Camavinga se presenta como un desafío médico significativo para el cuerpo técnico del Real Madrid.