Lo que siguió fue un duelo estratégico donde cada movimiento contó.
El dominicano Ramón Laureano encendió la chispa local con un "jonrón de 400 pies que golpeó el poste de foul en la pradera izquierda", según reportaron los analistas. Un disparo contundente contra el experimentado Clayton Kershaw que parecía anticipar otra noche amarga para los visitantes.
Pero el partido tomó un giro en la tercera entrada:
- Tres hits consecutivos de los Dodgers rompieron el ritmo de Randy Vásquez
- Shohei Ohtani aprovechó un rodado a la intermedia para generar la jugada que permitió a Conforto empatar
- Mookie Betts elevó un sacrificio magistral que trajo a Freeland al home
El momento decisivo llegó en la séptima entrada.
Teoscar Hernández, en un despliegue de poder puro, envió la pelota 400 pies sobre el bosque central contra Jeremiah Estrada. El
jonrón no solo rompió el empate, sino que inyectó confianza en un equipo que venía de cuatro derrotas seguidas.
Los Padres no se rindieron. En la octava, el venezolano Luis Arraez conectó un elevado de sacrificio que puso el marcador 3-2, tras jugadas polémicas donde Vesia golpeó a dos bateadores y caminó a Tatis Jr. para llenar las bases. La tensión llegó al máximo cuando Dreyer logró el out final con los amarrados en circulación.
Entre los datos destacados:
- Kershaw sumó su séptima victoria de la temporada
- La ofensiva dominicana brilló con Laureano y Hernández como protagonistas
- El empate en la cima de la División Oeste añade dramatismo a la rivalidad
El choque dejó ver la profundidad de ambos equipos, con aportaciones clave de jugadores latinoamericanos que definieron el ritmo del encuentro. Mientras los
Dodgers recuperan el aliento, los
Padres demostraron que no bajarán la guardia en esta pulseada por el liderato.
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