NUEVA YORK, NY
El filme de Peter Jackson se envuelve en polémica sobre trato animal en películas.
Cuatro empleados de una granja que proporciona ganado para el rodaje de la película El Hobbit revelaron que un grupo de animales de la finca sufrió una “muerte innecesaria” por culpa de los peligros del escenario de grabación.
Según su versión, unas 27 criaturas entre las que se incluían caballos, pollos, cabras y una oveja perecieron como consecuencia directa de la negligencia del equipo de producción y de la distribuidora, la multinacional Warner Bros.
Aunque las misteriosas muertes han sido confirmadas por el portavoz del director de la cinta, Peter Jackson, los responsables de la producción niegan que los incidentes hayan sido responsabilidad directa del equipo. Aunque reconoce que podrían haber hecho más para evitar estos incidentes, también asegura que el fallecimiento de algunos animales incluso se debió a “causas naturales”.