Los Ángeles, ca
Fans de la Diva señalan que hay mucha vigilancia para alejar a la gente que acude.
A un mes de la muerte de la cantante Jenni Rivera, todavía no se coloca la lápida que lleva su nombre en el cementerio “All Souls” de Long Beach, California, en donde descansa en paz.
Y es que se dice que la familia está fabricando una lápida especial para colocarla al pie de su tumba con un epitafio que definirá muy bien lo que fue en vida la Diva de la Banda.
“Aquí viene mucha gente a ver la tumba de Jenni, pero como no tiene su nombre muchas personas no saben dónde está”, dijo una persona que trabaja en el lugar pero que prefirió omitir su nombre.
“Ese espacio que se compró para Jenni vale aproximadamente 100 mil dólares y caben como ocho personas. Es algo especial que obviamente la familia trata de cuidar”, agregó.
En el cementerio hay ahora mucha vigilancia para alejar tanto a medios de comunicación como a fans y curiosos que quieren saber en dónde están enterrados los restos de La Diva de la Banda.
“Sí han venido muchas personas a visitarla (la tumba)”, indicó la fuente, “aunque, como digo, no se sabe si es de ella porque no tiene nombre, algunos sí reconocen el lugar porque se les dice. Su única intención es venir a rezar, rendirle un tributo a su ídolo”.
Muchos de los fans que han logrado llegar hasta la tumba le dejan flores y uno que otro recuerdo.
A diferencia de tumbas en donde se encuentran enterrados los restos de otros famosos en Los Ángeles (como Michael Jackson, Farrah Fawcett, Brittany Murphy), en donde la prensa sí tiene acceso aunque sea desde afuera para tomar imágenes, en la tumba de Jenni la vigilancia impide que se acerquen.