México, DF
Dar vida, el regalo más grande; los cambios de humor, lo más odiado.
Para verdades claras, ser mujer tiene sus ventajas y sus desventajas, y eso lo reconocen Tatiana, Natalia Lafourcade, Eiza González, Nora Salinas, María Sorté, Malú, Regina Orozco y Bianca Marroquín comparten lo que aman y odian de ser mujer.
“Lo peor es que no tenemos la facilidad de los hombres para orinar”, expresa la cantante Malú, en el marco del Día Internacional de la Mujer.
“Una tiene que desenrollarse todo lo que trae puesto para poder hacerlo”, añade Tatiana.
Entre otras incomodidades propias del género están aquellas relacionadas con las hormonas.
“Los cambios de humor, cuando te hinchas y no sabes si llorar o reír”, comenta La reina de los niños.
“Es una vez por mes cuando no quisiéramos ser mujer”, explica Malú.
El problema hormonal es uno de los más odiados, tanto que Eiza González, de 23 años, ya está preocupada por la menopausia y los dolores que eso provoca. Mientras que las estrías, las celulitis y los dolores del embarazo son parte de la lista de los achaques femeninos.
“Unas de las cosas que me encanta de ser mujer es que puedo dar vida y que en mí recae la responsabilidad de educarlos para el futuro”, señala la actriz Nora Salinas.
La posibilidad de ser madre es una ventaja única de la mujer. “Es gracias a nosotras que la especie humana aún subsiste, porque si los hombres se encargaran de eso ya nos hubiéramos extinguido; ellos con una gripita ya sienten que se mueren, quisiera verlos viviendo los dolores de parto”, dice Tatiana.
“En mi profesión, es muy difícil que un hombre se vista de mujer, por eso y por otras cosas, creo que podemos tener éxito en cualquier profesión que queramos, hacerlo igual y hasta mejor que cualquier hombre”, considera María Sorté.
Un solo día no es suficiente
Para Natalia Lafourcade, el festejo debería de ser cosa de todos los días. “Cada día que nos levantamos y decimos: bueno, empiezo mi día y lo celebro y me celebro a mí misma como mujer”, considera la cantante.
Mientras que Bianca Marroquín dice no desdeñar la oportunidad.