De actor menor a jefe de renombre, George Clooney

No era divertido tener roles pequeños, dice, pero tenía que darse a conocer.
Si bien al principio de su carrera tuvo que conformarse con papeles que no eran de su agrado, ya fuera en series de televisión o películas baratas, hoy en día George Clooney se ha ganado el respeto de la comunidad en la industria del espectáculo al ser capaz de generar sus propios proyectos en calidad de actor, productor y director, como sucede en su más reciente película “Operación Monumento”.
Pero no siempre su nombre ha sido suficiente para lograr sus proyectos, según revela:
“‘Argo’ fue difícil de lograr hacer, como también lo fue con ‘Buenas noches y buena suerte’, por la que tuve que hipotecar mi casa, así que sólo estamos tratando de hacer películas que no necesariamente son las más fáciles de hacer. A veces son exitosas y a veces no, pero son las que queremos hacer”.
Clooney, cuyos inicios actorales fueron en series de la televisión estadounidense, como “The Facts of Life”  antes de ser elegido para la serie “ER Sala de emergencias”, en el papel del doctor Doug Ross, que lo catapultaría a la fama y que permitió que productores de cine se fijaran en él.
“Cuando comienzas como actor, lo primero que tratas es de conseguir trabajo; por supuesto que no era muy motivante ser el sexto miembro en ‘The facts of life’, pero estaba emocionado con haber obtenido el trabajo, las cosas van cambiando.
“Grant (Heslov) y yo hemos sido socios por largo tiempo y hemos estado interesados en contar historias que sean únicas y que por lo general no son las más atractivas para los grandes estudios de cine”, dice el actor.
Su inspiración, explica el histrión, se basa en lograr las historias que no llegarían a hacerse si ellos no las buscan.
“Las otras, las grandes, al final de cuentas siempre se harán, es lo que tratamos de hacer”, señaló.

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