Coco Gauff supera batalla épica en el Abierto de Estados Unidos

Diez dobles faltas y seis quiebres de servicio pintaron un panorama complicado, pero al final, solo un número importó: el marcador a su favor.

"No fue lo mejor, pero estoy feliz de haber pasado", admitió Coco Gauff tras su victoria de 6-4, 6-7 (2), 7-5 sobre Ajla Tomljanovic en el Abierto de Estados Unidos. La tercera sembrada del torneo necesitó casi tres horas para superar a su rival en un duelo donde la consistencia brilló por su ausencia.

Los detalles que definieron el encuentro:

• Perdió dos ventajas de quiebre en el segundo set.
• Falló al servir para el partido con 5-4 en el tercer set, cometiendo dos dobles faltas consecutivas.
• Recuperó el quiebre inmediatamente después de igualar 5-5.

Detrás de esta lucha técnica hay un nombre clave: Gavin MacMillan. El especialista en biomecánica, conocido por su trabajo con Aryna Sabalenka, fue incorporado recientemente al equipo de Gauff para resolver su principal debilidad: las 320 dobles faltas que acumulaba antes del torneo, la cifra más alta en el circuito femenino esta temporada.

El ajuste en su servicio fue evidente. Comenzó con envíos lentos (promedio de 88 mph en el primer set), pero a medida que avanzaba el partido, recuperó potencia: 101 mph en el tercer set, incluso logrando un ace con segundo servicio. "Las prácticas con Gavin son realmente duras, mentalmente agotadoras", confesó la campeona defensora.

Entre bambalinas, MacMillan observaba desde la primera fila del palco, justo delante de la madre de Gauff. Un testigo privilegiado de cómo la tenista de 21 años convirtió un partido accidentado en otra muestra de su capacidad para resistir bajo presión.

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