México, DF
La cantante está en busca de un nuevo rumbo musical. Dice que es como ir desnuda.
En un año al que consideró creativo y en el cual espera rescatar los mayores espacios posibles para ella, Ely Guerra se siente plena y entusiasmada por el presente musical que vive y los 20 años de trayectoria que la avalan.
“Nosotros seguimos desarrollando nuestras ideas y propuestas en muchos otros sentidos más allá que del comercial y en ese trayecto vino el equilibrio”, afirmó la cantante. Es por ello que además de significar su sexta aparición en el Vive Latino, su presentación el 28 de marzo en los XV años del festival muestran una evolución.
Y, situación importante, ahora tocará en un horario más cómodo para ella sin el sol de frente. “Fue importante alejarnos del Vive Latino en el sentido de que nosotros empezamos una carrera independiente y también había que acomodarnos y volvernos a ganar la confianza de ese espacio y viceversa, que ellos también tuvieran ganas de tener artistas como uno”.
Con su presentación en el Centro Cultural Roberto Cantoral en diciembre pasado, la regiomontana se vio inmersa en un proyecto donde solamente estuvo acompañada de su piano y espera obtener un buen producto de ello.
“Fue interesante tener este encuentro muy desnudo. Fue confrontante medirme con la vara de decir que estaba desnuda con un solo instrumento que me acompaña, todo esto en miras a una nueva producción”, afirmó.
Es por estas mismas experiencias y hallazgos por lo que le gustaría cambiar un poco el rumbo que ha mantenido en su próximo álbum. “Siempre hubo una fórmula, un formato de cómo hacer música, siempre entrar al estudio ha sido un reto; uno como músico siente temor si podrá hacer algo mejor que el disco pasado o no, pero ahora siento ese temor mucho más profundo porque estoy rompiendo con patrones; quiero dedicarme a hacer mi nuevo disco porque (hasta ahora) no he tenido el tiempo de calidad ni emocional para escribirlo”.
“No soy una gran actriz”
Anteriormente participó en la pantalla grande al lado de actores como Enrique Arreola, Mario Almada, Fernando Ciangherotti en el filme La Pantera Negra, ópera prima del director Iyari Wertta. Ely Guerra aceptó en aquella ocasión porque interpretó a un personaje donde no tuvo que hablar, pero no le gustaría hacerlo más.
“Cuando me han invitado he sido coherente y he tratado de ser objetiva para participar en cosas precisas porque la verdad es que no me considero actriz y también eso uno lo va delimitando.
“Ahí fue una participación absolutamente pertinente porque nunca hablaba, entonces fue fácil representar eso ya que yo he hecho videos musicales y sé cómo actuar sin tener que dar un diálogo o interactuar con otro profesional, aunque finalmente los actores son un encanto”, refirió.