Con 28 años de trayectoria, ha conquistado escenarios y pantallas, pero ahora se embarca en un nuevo reto: la música.
El próximo 25 de septiembre, Chaparro se subirá al escenario del Lunario del Auditorio Nacional para presentar su música y, como él mismo lo ha definido, graduarse como intérprete. Su pasión por la música es una faceta que ha cultivado desde temprana edad y que encontró un punto de partida en 2012 con su primer álbum, "El gori gori".
"Llevo esperando toda mi vida hacer este concierto. Lo primero que nació en mí fue la música, que ha sido una terapia para mí", confesó en conferencia de prensa.
La música de Omar Chaparro no se limita a una sola corriente. Su principal objetivo es dejar que su alma tome el control, sin seguir las tendencias del momento. "Dejo que mi alma tome el control, no quiero seguir tendencias de lo que está sonando. Ya no soy un niño, tengo que decir lo que tenga que decir sin importar que me vayan a criticar, esto es mi historia", mencionó.
Chaparro es una inspiración para aquellos que se atreven a perseguir sus sueños, sin importar la edad o la posición que ocupen. Su historia demuestra que nunca es tarde para luchar por lo que nos apasiona, y que superar los miedos y la voz del ego es un paso fundamental en ese camino.
"Nacimos con algo que se llama ego; esa voz que se encarga siempre de meternos el pie en las relaciones, en el trabajo en la vida... que nos dice a menudo que no somos lo suficientemente buenos o que nuestras ideas no valen la pena; sin embargo, para avanzar hay que superarlos”.
Su carrera como actor no se aleja del horizonte, pero por ahora, la música es su prioridad. "Antes estaba más preocupado por lo que pasaría y hacía dónde iría; pensaba: ‘¿por qué no se escucha tanto mi nombre?’, hasta que descubrí que lo más fácil es estar aquí, disfrutar el momento, me di cuenta que el universo nos va a dar todo", concluyó.