El acuerdo fue recientemente aprobado por un juez, aunque los detalles permanecen confidenciales. La pareja, casada desde 2019 y padres de dos hijas, Willa y Delphine, enfrentó meses de disputas, principalmente sobre la custodia de sus hijos y la división de bienes.
La separación se formalizó en septiembre de 2023, cuando Joe Jonas solicitó el divorcio, lo que dio inicio a una serie de enfrentamientos públicos. Sophie Turner pidió reactivar el proceso en marzo de 2024 tras meses de mediación, que se había intentado mantener privada para proteger a sus hijas. Finalmente, Sophie solicitó al tribunal que resolviera el conflicto de custodia y pusiera fin al matrimonio mediante una decisión judicial.
Los desacuerdos sobre la residencia de las niñas fueron una fuente importante de conflicto. Sophie quería trasladarlas al Reino Unido, mientras que Joe prefería mantenerlas en Estados Unidos. A pesar de tener un acuerdo prenupcial que probablemente evitó disputas sobre propiedades, la pareja no logró acordar la custodia de sus hijas, lo que llevó a Sophie a presentar una reclamación de secuestro infantil en enero, aunque luego la desestimó.
En octubre de 2023, se estableció un acuerdo de custodia temporal, permitiendo a cada padre tener a las niñas dos semanas a la vez y facilitando sus viajes entre Estados Unidos y el Reino Unido. Este acuerdo se logró tras intensas sesiones de mediación en Nueva York y se esperaba que facilitara la resolución final del divorcio.
Desde la separación, ambos han seguido adelante con nuevas relaciones. Sophie comenzó un romance con Peregrine Pearson, heredero del Viscount Cowdray, mientras que Joe tuvo una aventura con la modelo Stormi Bree y ha sido vinculado con varias otras figuras públicas, incluida Demi Moore. Ambos han mantenido un perfil bajo desde el acuerdo de custodia temporal, centrando sus vidas en sus nuevas relaciones y proyectos personales.