La boda, que se llevó a cabo en la villa Cetinale, una mansión barroca del siglo XVII situada en la Toscana, fue un evento digno de un cuento de hadas.
La villa Cetinale, con su historia rica y sus impresionantes jardines, fue el escenario perfecto para la boda de Millie y Jake. La pareja intercambió votos bajo un arco floral en el jardín, rodeado de rosas trepadoras, lirios, iris y pérgolas cubiertas de parras.
Millie lució un vestido de encaje con corpiño y una larga cola, un velo de tul sujeto en el pelo, diseñado por Galia Lahav. La firma Galia Lahav, conocida por vestir a otras novias famosas como Simone Biles y Nadia Ferreira, describió la experiencia de vestir a Millie para su boda como un "viaje emocionante, divertido y creativo".
"Nos sentimos muy honrados de haber vestido a Millie Bobby Brown para su boda de cuento de hadas con Jake Bongiovi. Diseñar su vestido a medida fue un viaje emocionante, divertido y creativo y no podríamos haberlo hecho sin el increíble Ryan Young ¡Cada detalle salió a la perfección y no podemos dejar de desmayarnos por lo impresionante que estaba", dijo Galia Lahav.
Para el pastel, los novios eligieron un tamaño XL de inspiración árabe con hojaldre, crema y frutas. La fiesta, con bolas de espejo, tuvo un ambiente de discoteca, con Millie tomando divertidas fotografías con sus invitados.
La boda de Millie Bobby Brown y Jake Bongiovi fue un evento inolvidable, lleno de detalles encantadores y un ambiente festivo. La pareja, que ha estado junta durante tres años, ha comenzado un nuevo capítulo en sus vidas como marido y mujer, con la bendición de familiares y amigos.