La película "La sustancia" retrata esta realidad con una historia ficticia, pero con una temática muy real: el estigma de mantenerse vigente en un mundo donde la belleza es sinónimo de éxito.
La historia de Demi Moore en la película es un reflejo de la lucha que muchas mujeres famosas enfrentan. El deseo de combatir el paso del tiempo las lleva a someterse a procedimientos que pueden tener consecuencias devastadoras.
"Simplemente tomé la palabra de la mujer de que eso era lo que era (...) ¿No tengo una hermosa piel de salmón?", dijo Aniston con humor.
Aunque suene descabellado, Aniston no es la única que ha recurrido a métodos poco ortodoxos para mantener su belleza. El mundo del espectáculo está obsesionado con la perfección y la eterna juventud, lo que ha llevado a que las celebridades exploren una gran variedad de tratamientos, algunos más convencionales que otros.
La película "La sustancia" nos recuerda que la búsqueda de la juventud eterna puede tener un costo muy alto. No se trata solo de procedimientos estéticos invasivos, sino también de la presión social y la lucha interna que muchas mujeres enfrentan al intentar cumplir con los estándares de belleza impuestos por la industria del entretenimiento.