En los años 90, la historia del hip hop se tiñó de una rivalidad que marcó un antes y un después: la batalla entre las costas este y oeste, con Tupac Shakur y Sean Combs, más conocido como P. Diddy, como protagonistas.
La amistad profesional que alguna vez unió a Tupac y The Notorious B.I.G., protegido de Diddy, se transformó en un conflicto que escaló a niveles inimaginables. El desencadenante, una emboscada a Tupac en 1994, donde fue atacado a tiros en el lobby de un estudio de grabación en Nueva York, sembró la semilla de la desconfianza y el odio.
Tupac, en su música, acusó a Diddy y B.I.G. de estar detrás del ataque. La tensión aumentó cuando Tupac lanzó el single "Hit 'Em Up", una brutal diatriba contra B.I.G. y Diddy. Esta canción marcó un punto de quiebre, dando inicio a una guerra de poder entre dos potencias del hip hop: Death Row Records, liderada por Suge Knight, y Bad Boy Records, de Diddy.
Death Row Records, con Tupac como punta de lanza, representaba la costa oeste con un sonido crudo y directo. Bad Boy Records, con B.I.G. como figura central, era el reflejo de la costa este, con un enfoque más comercial y elegante.
La rivalidad escaló a niveles insospechados. La muerte de Tupac en 1996, tras recibir múltiples disparos en Las Vegas, conmocionó al mundo del hip hop. La investigación sobre su asesinato, marcada por la falta de cooperación de testigos, sigue sin resolverse.
Sin embargo, una nueva luz se proyecta sobre el caso. Dwayne Keith Davis, miembro de la pandilla Southside Crips, declaró que Diddy le ofreció dinero para eliminar a Tupac y a Suge Knight. Davis, arrestado en 2023, afirma que la motivación detrás del ataque fue la disputa que Tupac tuvo con Orlando Anderson, miembro de la misma pandilla.
La familia de Tupac, decidida a encontrar respuestas, ha contratado al reconocido abogado Alex Spiro, quien ha defendido a figuras como Elon Musk y Alec Baldwin, para reabrir la investigación.
El testimonio de Davis, aunque aún por confirmar, revive la polémica. Diddy, por su parte, niega cualquier implicación en la muerte de Tupac.
La sombra de la duda sigue sobrevolando a Diddy, mientras la industria musical se pregunta si finalmente se desvelará la verdad detrás del asesinato de uno de sus iconos.