A los 14 años, la joven actriz comenzó una relación tóxica que duró 6 años, un período en el que se vio envuelta en un ciclo de abuso emocional que llegó a normalizar.
"Era como: 'Allá afuera me bombardean y me dicen que soy lo peor, pero tú me tratas mal pero no tan mal, tú sí me quieres tantito'. Total, para mí era normal que me celara, para mí era normal que me mandara a cambiar, para mí era normal...", comentó Sofía Castro.
La actriz mencionó que su familia, especialmente su madre, se percató de la situación y le insistió en que se alejara de su novio. "En desquicie me decían: 'Date cuenta, por favor'. Mi mamá y yo somos muy cercanas y siempre hemos tenido una relación muy cercana, fue donde más me distancié de mi familia obviamente, donde más me distancié de Fernanda...", reveló.
La decisión de Angélica Rivera y José Alberto Castro fue contundente. "A finales de 2016 llegó mi mamá y le dijo a mi papá: 'La tenemos que sacar de México porque si no, no lo va a dejar y va a arruinar su vida'. Fue cuando me mandaron a Los Ángeles a los 20, me fui en enero de 2017. No dije nada, yo creo que también sentí para mí que era un escape, que era la única manera que yo lo iba a poder dejar y poner tierra de por medio", confesó Sofía.
La distancia le permitió a Sofía reconstruirse y recuperar su confianza. "Cuando yo llegaba a la escuela, cuando yo llegaba a un casting nadie sabía quien era yo. Los Ángeles me curó de muchos lados, curó como esa parte personal de mi relación y también sanó como esa parte de que me empecé yo a valer como actriz... Eso me dio mucha seguridad, Los Ángeles me rescató de alguna manera. Me empecé a reconstruir...", finalizó.