La pregunta que todos se hacían era: ¿quién pagó la cuenta?
Horas antes de la boda, el periodista Jorge Carbajal había mencionado en su canal de YouTube que el evento había costado más de 30 millones de pesos y que 700 invitados se hospedarían en el hotel durante la celebración. Sin embargo, "una fuente cercana a los novios negó que el costo fuera tan elevado", según la periodista Maxine Woodside.
Según Woodside, la boda fue parcialmente financiada por padrinos y patrocinadores. Los padres de la novia, Sofía Castro, cubrieron los gastos de la boda religiosa en San Miguel de Allende, mientras que los padres del novio, Pablo Bernot, proporcionaron el banquete. Además, varios padrinos también colaboraron en los gastos del evento, lo que contribuyó a reducir el costo final de la celebración.
El productor José Alberto Castro, padre de Sofía, había bromeado previamente sobre el financiamiento de la boda, sugiriendo que, como es tradición, los padres de la novia se encargaban de los gastos principales. Sin embargo, Maxine Woodside confirmó que la boda civil fue financiada por los padres de Pablo Bernot, mientras que los padres de Sofía Castro cubrieron la celebración religiosa en San Miguel de Allende.
En cuanto a los patrocinadores, Woodside mencionó que varias marcas aprovecharon la ocasión para asociarse al evento, enviando productos como champán para la celebración. Aunque no reveló el nombre de los patrocinadores, destacó que el alcance mediático de la boda de Sofía Castro hizo de este tipo de colaboraciones una oportunidad valiosa para muchas empresas.
Entre los invitados a la boda se encontraban varias figuras públicas de Televisa, como Irina Baeva y Emmanuel Palomares. Las imágenes del evento han sido ampliamente compartidas en redes sociales, consolidando aún más el impacto mediático de esta lujosa celebración.