Hablamos, por supuesto, de Sofía Castro y Pablo Bernot, quienes tras una luna de miel que los llevó por Camboya, Hong Kong y Japón, culminaban sus celebraciones en el paraíso balinés. Sus redes sociales, hasta ese momento, habían sido un derroche de imágenes idílicas: playas paradisíacas, templos milenarios, sonrisas radiantes… un cuento de hadas, en apariencia inquebrantable.
Pero la magia, a veces, se quiebra con un simple tropiezo. En medio de la oscuridad de su habitación de hotel, y con un dulce obsequio de por medio, ocurrió el incidente. Un pastel de "happy honeymoon", un regalo del hotel, se convirtió en el protagonista involuntario de una divertida escena.
Fue la propia Sofía quien, a través de sus historias de Instagram, narró la ocurrencia. “Jajajaja nos trajeron este bello pastel de happy honeymoon y Pablo está dormido y yo echada con todas las luces apagadas. Jajajaja no vi, me tropecé y esto sucedió”, escribió junto a una fotografía del pastel, ahora irreconocible, convertido en un dulce desastre.
Afortunadamente, el percance no pasó a mayores. Si bien no ofreció detalles sobre posibles magulladuras o golpes, Sofía dejó claro que todo quedó en risas, un divertido recuerdo que, lejos de opacar la felicidad, la consolidó aún más. La alegría de iniciar el 2025 junto a su esposo, en un lugar tan mágico como Bali, superó con creces cualquier contratiempo.
La llegada del nuevo año fue celebrada con una fotografía en blanco y negro, donde Sofía, con gafas de sol alusivas al 2025, irradiaba felicidad. Una imagen que resume a la perfección el espíritu de la pareja: la capacidad de sobreponerse a lo inesperado, de transformar un accidente en una anécdota memorable, y sobre todo, de disfrutar cada instante al máximo. El resto de su viaje, según sus publicaciones, continúa desarrollándose con la misma intensidad y alegría.
La pareja parece dispuesta a seguir compartiendo su aventura, prometiendo más momentos mágicos a través de sus redes sociales en los próximos días.