El nombre de Sean "Diddy" Combs resonó en la noche, no por un logro profesional, sino a través de una ácida broma de la presentadora, Nikki Glaser. La comediante, conocida por su humor directo, no se anduvo con rodeos al comentar sobre la película Challengers.
“Y Challengers, chica, esa película tenía más carga sexual que la tarjeta de crédito de Diddy”, dijo Glaser, provocando un incómodo silencio en la sala. “Digo, en serio. Oh, no, lo siento. Yo también estoy molesta, porque el afterparty no será tan bueno este año”. La frase, aparentemente inocente, ocultaba una referencia a las controvertidas fiestas privadas de Combs, ahora bajo intensa investigación.
La broma de Glaser apuntaba a las acusaciones de abuso sexual que pesan sobre Diddy, vinculadas a sus famosas “freak-offs” o “White Parties”. Estas fiestas, al parecer, eran escenarios de presuntas violaciones y tráfico sexual, con la presunta complicidad de algunas figuras influyentes de Hollywood. Las autoridades federales están investigando a fondo estos eventos y sus posibles conexiones con otras personalidades.
El caso contra Diddy es complejo y alarmante. Se enfrentan más de 200 denuncias, algunas de ellas relacionadas con abusos sexuales a menores. Su equipo legal niega categóricamente estas acusaciones, pero la evidencia, incluyendo un impactante video de vigilancia de 2016 donde se le ve agrediendo físicamente a su ex esposa, Cassie Ventura, complica su defensa.
Este video, difundido por CNN, muestra a Combs sujetando por el cuello a Ventura, arrojándola al suelo y arrastrándola por un pasillo del Hotel Intercontinental. Su defensa alega que la filtración de este y otros materiales compromete su derecho a un juicio justo, acusando al DHS de una campaña de desprestigio. Sin embargo, el juez ha desestimado estas acusaciones por falta de pruebas.
El juicio de Diddy está programado para el 5 de mayo de 2025, con una próxima comparecencia el 17 de marzo. Mientras tanto, la broma de Nikki Glaser en los Globos de Oro ha servido como un recordatorio escalofriante de las sombras que pueden ocultarse tras el brillo y el glamour de Hollywood.