La influencer Killadamente, cuyo nombre real era Carol Acosta, de 27 años y madre de dos pequeños, falleció el pasado 3 de enero. La versión inicial, dada por su familia, apuntaba a un trágico accidente durante una cena familiar: una asfixia que derivó en un paro cardiorrespiratorio. Esta narrativa, sin embargo, ha sido desafiada con fuerza.
Recientemente, una serie de vídeos publicados por personas que se identifican como "amigas" de Killadamente han generado una ola de conmoción entre sus seguidores. En estas grabaciones, se afirma categóricamente: "Lamentablemente nuestra querida Killada falleció, todos los saben. Ella misma se quitó la vida". Las imágenes, cargadas de emotividad y dolor, presentan una versión radicalmente distinta a la inicialmente difundida.
La acusación no se detiene ahí. Uno de los videos va más allá, apuntando directamente a la familia de Acosta: "¿ustedes saben lo que es un ser humano tomar la decisión de quitarse la vida? Ella no estaba en ningún restaurante", se escucha con un tono de reproche. La implicación es clara: un intento de ocultar la verdadera causa del deceso.
Hasta el momento, la familia de Killadamente no ha respondido públicamente a estas nuevas y devastadoras afirmaciones. El silencio, en este contexto, ha alimentado aún más las especulaciones y la controversia en torno a la muerte de la joven influencer, dejando un vacío de información que solo el tiempo —y quizás las futuras declaraciones— podrán llenar.
El impacto de este giro inesperado en la historia es innegable. Las redes sociales, que vieron crecer la popularidad de Killadamente, ahora son testigo de una batalla de versiones que ha polarizado a sus seguidores, dejando una profunda incertidumbre sobre la verdadera historia detrás de su fallecimiento.