Hablamos de Mark Vanderloo, el modelo holandés que conquistó las pasarelas internacionales en los años 90. Su nombre, sin duda, evoca imágenes de campañas publicitarias icónicas y portadas de revistas de moda. Su breve pero intensa historia de amor con la supermodelo española Esther Cañadas, un romance que culminó en una boda en 1999 en España y finalizó un año después, es un capítulo recordado por muchos.
Hoy, a sus 56 años, Vanderloo vive una vida tranquila en Países Bajos con su esposa, Robine van der Meer, y sus dos hijos: Emma, de 20 años, y Mark Jr., de 19. Pero la vida, a veces, te reserva sorpresas. El apacible ritmo de su vida familiar se ha visto interrumpido –o mejor dicho, condimentado– por una nueva aventura.
Su reaparición en la televisión española, en el programa Bake OFF: famosos al horno, ha vuelto a ponerlo en el foco mediático. Sin embargo, lo que realmente ha llamado la atención no es su destreza repostera, sino la revelación de que su hijo menor, Mark Jr., está siguiendo los pasos de su famoso padre en el mundo del modelaje. Una nueva generación, lista para conquistar las pasarelas. Una historia familiar que trasciende el tiempo, un legado que se renueva, una nueva generación que continúa la saga. "El mundo de la moda es exigente, pero la pasión familiar parece ser más fuerte."
La vida, así como el buen pan, requiere de ingredientes inesperados para obtener un resultado delicioso. El regreso de Vanderloo a los medios españoles, junto a la trayectoria emergente de su hijo, es solo una prueba más de ello.