Se trata de una artista que, tras un periodo de relativa calma, regresa con fuerza, dispuesta a romper esquemas y a desatar una tormenta perfecta de emociones.
El nombre en cuestión es Cazzu, la cantante argentina que, tras el nacimiento de su hija Inti, fruto de su relación con Christian Nodal, ha vuelto a la escena musical con "Dolce", un explosivo corrido tumbado que ya está dando mucho de qué hablar. La canción, lanzada después de un tiempo alejada de los escenarios, no es solo una pieza musical; es una declaración de intenciones.
La letra, "Te creí y yo no doy más de una oportunidad. Ojalá te dure eso de aparentar. Mujeres bonitas, ninguna real. Como yo, que contigo estaba a morir y a matar," es tan directa como impactante. Muchos interpretan estas líneas como una respuesta a un pasado amor, alimentando las teorías sobre posibles dedicatorias. La imagen de Cazzu con cuernos en el videoclip refuerza estas especulaciones, añadiendo una capa extra de misterio y simbolismo.
Pero "Dolce" es más que un simple desahogo. Es un potente mensaje de empoderamiento femenino. La repetición de la frase, "Yo también sé bien cómo portarme mal," junto a la alusión a su éxito material – "Si ya tengo mi Mercede', ¿pa' qué quiero una G-Wagon? Me quería dar diamante', ya me los había comprado. Mucho ante' de conocerte yo ya había coronado"—, pinta un retrato de una artista que ha superado una etapa difícil y que ha salido fortalecida.
La elección del género, el corrido tumbado, tan popular en México, no es casual. Es una estrategia inteligente para ampliar su alcance y mostrar su versatilidad musical. La canción es una mezcla compleja de emociones: dolor, rabia, pero sobre todo, triunfo personal. Cada nota, cada verso, vibra con una energía palpable.
Un detalle que ha llamado la atención es la repetida mención del "vestido Dolce". ¿Una referencia a la marca? ¿Un simbolismo más profundo? El misterio persiste, manteniendo la conversación y el interés en torno a la canción a pleno auge. La pregunta queda en el aire: ¿Qué más sorpresas nos deparará Cazzu?