La historia comienza, no con la polémica en sí, sino con la fascinación creciente de extranjeros por la vida en la capital mexicana, una tendencia impulsada, en parte, por el trabajo remoto y el costo de vida, relativamente, más bajo comparado con otras metrópolis globales. El centro de la discusión es Arielle Simone, conocida en redes como "Holistic Mami", quien ha residido en la Ciudad de México durante dos años. Su llegada, al igual que la de muchos otros expatriados, ha generado un debate complejo sobre el impacto socioeconómico de la migración internacional en barrios tradicionales.
Simone, tras celebrar su aniversario en la ciudad con un video en redes sociales, solicitó 4,500 dólares (aproximadamente 90,000 pesos mexicanos) a través de una plataforma de crowdfunding para mudarse de colonia. Esta decisión, sumada a comentarios previos en los que describió la vida en México como "muy barata" y usó términos considerados ofensivos al referirse a los residentes locales, encendió las redes sociales.
Las críticas hacia la influencer se centran en la acusa de gentrificación. Se le reprocha el desplazamiento potencial de vecinos de bajos recursos, quienes ahora enfrentan un aumento en el costo de vida debido a la afluencia de extranjeros con mayor poder adquisitivo.
La situación ha puesto en relieve el impacto de la gentrificación en la Ciudad de México. Colonias como la Condesa (con rentas promedio de 31,000 pesos), Hipódromo Condesa (38,000 pesos), Roma Norte y Sur (29,000 pesos), Juárez (24,000 pesos), y Escandón (23,000 pesos), se ven particularmente afectadas. Este incremento en los precios de renta ha contribuido a que la Ciudad de México ocupe el lugar 16 de 25 en el ranking de ciudades más caras para vivir, según el Global Wealth & Lifestyle Report 2024 de Julius Baer, superando incluso a ciudades como Miami y Bangkok.
El caso de Arielle Simone, más allá de la polémica individual, refleja un fenómeno urbano complejo que requiere un análisis profundo sobre el equilibrio entre el desarrollo económico y la preservación de la identidad cultural y la estabilidad social de las comunidades locales.