Mansión embrujada de Adele: $7.4 millones y sin comprador
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Nicol Matuz Scott
Nos referimos a Lock House, en West Sussex, una imponente mansión de 10 habitaciones, con un pasado que se remonta a los años 70 cuando funcionaba como convento. Su actual propietario, Nicholas Sutton, lleva 13 años intentando venderla sin éxito. El problema no reside en la falta de interés, ni en el precio (6 millones de libras, unos 7.4 millones de dólares), sino en un rumor que persigue a la propiedad como una sombra.
El culpable, según Sutton, es una famosa cantante británica: Adele. Resulta que durante una breve estadía de seis meses en Lock House, Adele, en una entrevista con Anderson Cooper para el programa 60 Minutes en 2012, comentó que la casa le parecía "bastante aterradora". Un comentario que, aunque sin una afirmación explícita de embrujo, fue suficiente para sembrar la duda.
La declaración de Adele, amplificada por tabloides británicos como Hello! que la incluyeron en listas de casas embrujadas de celebridades, generó un efecto dominó. Posibles compradores, al enterarse de los “rumores”, se retiraron. Sutton asegura que incluso un comprador interesado en 2020 desistió al conocer la historia. El impacto es tal que, a pesar de la gestión de agencias inmobiliarias de renombre como Savills y Strutt & Parker, la mansión permanece sin dueño.
Ante esta situación, Sutton ha presentado una solicitud al consejo del distrito de Horsham para convertir Lock House en apartamentos. Esta decisión, argumenta él, no solo busca solucionar el problema de venta, sino también preservar la estructura histórica del edificio y contribuir a la necesidad de vivienda en la región.
Mientras tanto, el consejo aún no decide sobre la solicitud. El futuro de Lock House, la mansión que Adele calificó como "aterradora," permanece incierto. Un dato curioso: la cantante, lejos de verse afectada por este asunto, ha experimentado un considerable aumento de su fortuna gracias a su exitosa residencia en Las Vegas, “Weekends with Adele”, generando ganancias de aproximadamente 1.75 millones de dólares por cada espectáculo.
Las cuentas de sus empresas, Melted Stone Publishing Ltd, Melted Stone Ltd y A. Adkins Touring Ltd, muestran ganancias impresionantes en 2023, demostrando el éxito de su carrera musical, un éxito que contrasta con la problemática persistente de la venta de Lock House.
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