Sin embargo, la noticia trasciende la simple presentación de un nuevo álbum. La reaparición sorpresiva de Abel Tesfaye, nombre real del cantante, en la ceremonia de los Grammy, luego de un boicot de tres años, ha generado un revuelo mediático considerable. Su ausencia en la edición 2021, tras el rotundo éxito de "After Hours", fue un episodio que marcó una profunda ruptura entre el artista y la Academia de Grabación.
Recordemos que en 2021, The Weeknd declaró al New York Times: “Ya no permitiré que mi disquera envíe mi música a los Grammy”, argumentando la existencia de "comités secretos" que, en su opinión, favorecían a ciertos artistas. Esta decisión se tomó tras la ausencia total de nominaciones para "After Hours", un álbum doble platino.
La Academia, por su parte, explicó que estos comités, establecidos en 1989, buscan minimizar el sesgo a favor de artistas reconocidos, priorizando a talentos emergentes y producciones independientes. Harvey Mason Jr., presidente interino de los Grammy, declaró en su momento: “Estamos constantemente evolucionando…vamos a analizar cómo mejorar nuestro proceso de premios, incluyendo los comités de revisión de nominaciones.”
Ahora, con su regreso a los Grammy, interpretando "Cry For Me" y "Timeless" junto a Playboi Carti, The Weeknd parece haber dejado atrás esa disputa. Su nueva película, en la que compartirá créditos con Jenna Ortega y Barry Keoghan, basada en "Hurry Up Tomorrow", se estrenará este año. Las críticas iniciales del álbum son excelentes; Roisin O’Connor, de The Independent, lo calificó con cinco estrellas, destacando su ambición y su propuesta cinematográfica.
Este nuevo capítulo en la carrera de The Weeknd abre interrogantes sobre el futuro del artista y la evolución de su relación con la industria musical. La expectativa por su próxima etapa artística es, sin duda, muy alta.