The Assessment: Distopía de control parental y cambio climático

Este escenario, tan cercano a la ciencia ficción como a nuestra propia realidad, es el telón de fondo de "The Assessment", una película que nos enfrenta a preguntas incómodas sobre la paternidad responsable y el control social.
La historia gira en torno a Mia (Elizabeth Olsen) y Aaryan (Himesh Patel), una pareja aparentemente perfecta que anhela formar una familia. Ellos pertenecen a la élite privilegiada, aquella que puede acceder a "The Assessment", una prueba exhaustiva para evaluar su idoneidad como padres. La encargada de ponerlos a prueba es la implacable Virginia (Alicia Vikander), una examinadora con métodos poco ortodoxos.
Su vida, en una casa costera ultramoderna, contrasta con el mundo devastado que los rodea. Mia, una científica dedicada a la investigación de alimentos sostenibles, y Aaryan, un brillante creador de mascotas virtuales (debido a la prohibición de animales reales), encarnan el ideal de ciudadanos responsables. "¿Ciudadanos responsables que cumplen con las reglas deberían poder ser padres, ¿no?", se preguntan ellos mismos, una frase que resume la premisa central de la película.
La evaluación es una serie de desafíos que explora las complejidades de su relación. Desde lidiar con un berrinche infantil hasta una cena con una invitada especialmente mordaz, interpretada por Minnie Driver, cada prueba revela las grietas en su fachada perfecta. Se nos presentan situaciones que nos hacen cuestionarnos nuestras propias aptitudes y la naturaleza de la perfección misma.
La película, dirigida por Fleur Fortuné, se destaca por su impecable dirección de arte a cargo de Jan Houllevigue y una cinematografía cautivadora de Magnus Jonck, que crean una atmósfera tensa y elegante. El uso del humor negro y el suspense psicológico es notable, aunque la resolución de un enigma clave en la escena final se siente un poco insatisfactoria.
A pesar de este pequeño detalle, "The Assessment" ofrece una reflexión profunda sobre temas relevantes. La actuación de Vikander como Virginia es excepcional; crea una antagonista inquietante que nos deja con la pregunta latente: ¿A qué costo la uniformidad? ¿Vale la pena sacrificar la individualidad por la supuesta estabilidad social?
El mundo presentado en "The Assessment" es una distopía elegante pero inquietante que deja al espectador reflexionando sobre el control social, el autoritarismo y las decisiones individuales en un contexto global de desafíos sin precedentes. Un detalle que resalta la complejidad de la película es la inversión en la tecnología, pero sin olvidar el daño ambiental como el motor del conflicto central.