Cecilia Galliano: El nido vacío y una nueva etapa

Sin embargo, para algunos, representa un cambio profundo, una nueva etapa que requiere adaptación y una buena dosis de valentía.
Cecilia Galliano, la reconocida actriz y conductora mexicana de 43 años, nos comparte en una entrevista exclusiva con TVNotas, sus sentimientos tras un acontecimiento familiar significativo. Su exitosa carrera, que incluye la próxima grabación de la tercera temporada de "El príncipe del barrio", estreno en junio, no opaca la realidad de su vida personal.
El motivo de sus reflexiones? La independencia de sus hijos. Primero fue Valentina, quien decidió volar sola tras concluir sus estudios en España. “Todo fue de repente. Aunque soy una mujer muy libre, hay ciertas cosas que cuestan trabajo”, confiesa Cecilia, recordando la experiencia similar de cuando Valentina se fue a vivir con su padre a los 13 años. Sin embargo, esta vez es diferente; la partida de su hijo Santiago a Estados Unidos para estudiar, seguida de la decisión de Valentina de vivir por su cuenta, ha dejado un vacío palpable en su hogar.
“Las primeras semanas pasaba por las habitaciones y olía sus camas. Los extrañaba mucho. Fue cuando empecé a escuchar eso del nido vacío. Leí cuanta cosa me encontré y justo estaba viviendo todas esas emociones”, relata con sinceridad. Este proceso la llevó a refugiarse en el trabajo, llenando su agenda hasta finales de año con proyectos como la tercera temporada de "La casa de los famosos" y la cuarta de "El príncipe del barrio", además de un nuevo pódcast.
Este pódcast, según Cecilia, será una oportunidad para mostrar una faceta más íntima: “Quiero que conozcan a la Cecilia más allá de la que está en la televisión. Quiero dejar a un lado ese ‘sex symbol’ y que me vean tal cual soy en mi casa, de pants, de cero glamour. Que se hable de todo.”
En cuanto al ámbito sentimental, Cecilia se encuentra soltera, disfrutando de su independencia: “Me llevo increíblemente bien conmigo misma. Después de que me separé de Mark (Tacher), dije: ‘Me voy a tomar un tiempo para ver qué quiero’. Ese tiempo ya fueron 9 años (ríe). Siempre fui de parejas, pero después de ese rompimiento tomé terapias para conocerme mejor. Me gusta mi tiempo. Soy libre.”
Su historia nos muestra la complejidad de las etapas vitales, la resiliencia y la capacidad de adaptación ante el cambio. Un testimonio de una mujer que, a pesar del vacío en su hogar, se mantiene firme en su camino personal y profesional.