Nikki Glaser teme represalias en Estados Unidos tras burlarse de Trump en show en Canadá

Recientemente, Nikki Glaser, incluida en la lista TIME100 de las personas más influyentes de 2025, compartió una inquietud que ha generado debate entre comediantes y seguidores. Durante una entrevista con la revista Time, Glaser reveló sus temores sobre las consecuencias de sus chistes políticos, específicamente aquellos dirigidos al expresidente Donald Trump.
La comediante, conocida por su estilo irreverente, confesó haber criticado duramente a Trump durante una presentación en Canadá. “En Canadá, me solté. Fue genial,” comentó. Sin embargo, esta experiencia la llevó a cuestionar si sus comentarios podrían tener repercusiones a su regreso a Estados Unidos.
Esta preocupación no es infundada. Glaser mencionó el caso de su amiga, la comediante Jena Friedman. Friedman, quien también se presentó en Canadá, narró en Instagram su experiencia en la aduana estadounidense a su regreso. "El agente de aduanas me preguntó si hacía chistes sobre políticos," escribió Friedman. Aunque el incidente no pasó a mayores, la anécdota alertó a Glaser sobre la posibilidad de ser revisada o incluso enfrentar consecuencias más serias por sus chistes.
La situación pone de manifiesto las complejidades de la libertad de expresión en un contexto globalizado. Las declaraciones de Glaser y Friedman nos invitan a reflexionar sobre los límites del humor político, especialmente en un escenario donde las fronteras internacionales y la vigilancia digital se han vuelto más permeables. La experiencia de ambas comediantes resalta la necesidad de considerar las posibles implicaciones de los comentarios públicos, sobre todo en un ambiente político tan polarizado.
El silencio por parte de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos ante la solicitud de comentarios de Fox News Digital, deja abierta una puerta a la especulación y la incertidumbre. Se espera, sin embargo, que esta situación sirva como un llamado de atención para los artistas, recordándoles que en un mundo hiperconectado, el alcance de sus palabras trasciende el escenario del stand-up.