México, DF
Se encuentran detenidos y sujetos a proceso penal por la venta de información reservada.
La Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO), deslindó de cualquier responsabilidad criminal a la procuradora de Justicia, Marisela Morales Ibáñez, luego que se descubriera que el ex funcionario Manuel Arroyo Hernández “vendía” información de inteligencia a Joaquín El Chapo Guzmán, uno de los capos del Cártel del Pacífico, “presumiendo” estrecha cercanía con la Procuradora.
José Cuitláhuac Salinas, responsable de la fiscalía anticrimen, expuso en conferencia que proveía reportes de acciones contra integrantes del cártel de El Chapo, Ismael El Mayo Zambada y Juan José Esparragoza Moreno El Azul.
Según el funcionario federal, Arroyo Hernández, ex coordinador Técnico de la otrora SIEDO -hoy SEIDO- y antes ex coordinador de Combate al Terrorismo de la Policía Federal, junto con otros seis funcionarios y ex funcionarios, formaba la red de informantes pagados por El Chapo Guzmán.
Los mencionados se encuentran detenidos y sujetos a proceso penal por la venta de información reservada y no solo se logró corromper a funcionarios de la Procuraduría General de la República (PGR), sino de otras instituciones; de estas últimas, no realizó precisión alguna sobre cargo o corporación.
Empero, fue enfático en el caso de Arroyo Hernández, quien se “vendía” ante los grupos delictivos como una persona “muy cercana” a Marisela Morales, para ganarse su confianza y así poder cotizar mejor sus servicios de informar sobre averiguaciones previas, órdenes de cateo u operativos que se realizarían en contra de los integrantes del Cártel del Pacífico.