Madrid, Esp
Insinúan que los videojuegos pudieron tener algo que ver en su forma de actuar.
El ex abogado y detractor de los videojuegos, Jack Thompson, no demoró en poner la culpa en el entretenimiento interactivo por el lamentable tiroteo ocurrido el pasado viernes en una escuela primaria de Connecticut, mismo que dejó 26 víctimas, la mayoría de ellas niños.
En un correo enviado a un portal especializado, dijo que la sangre estaba en manos tanto de periodistas como de la industria en general, en lo que más allá de la aberración, constituye una enorme falta de respeto no sólo para quienes laboran en el medio y gustan de esta forma de entretenimiento, sino también y principalmente para las víctimas y sus familias.
No es la primera vez –y probablemente no sea la última– que Jack Thompson arremete contra los videojuegos. En el pasado atacó títulos como Grand Theft Auto, Bully y Mortal Kombat, pero también a la barra de abogados de Florida, así como la red social Facebook por distintos motivos. Cabe aclarar que Thompson fue inhabilitado como abogado en 2008 por la Suprema Corte de Florida por conducta inapropiada.
Este es un tema de nunca acabar. Cada vez que ocurre una tragedia de estas proporciones los videojuegos siempre serán señalados como uno de los causantes del desorden mental de los asesinos.