México, DF
Las tiendas armamentistas registran un repunte en la venta de rifles de asalto.
La venta de armas en Estados Unidos se disparó en las últimas semanas ante el temor de los ciudadanos a que el gobierno del presidente Barack Obama establezca nuevas restricción para adquirir armamento.
Esta alza se registró principalmente en la venta de armas de asalto, las cuales son el principal objetivo de prohibición. En diciembre se marcó un récord en la adquisición de armamento de acuerdo con cifras de la National Shooting Sports Foundation que publicó el diario The New York Times.
Poco más de 2 millones de revisiones de antecedentes se realizaron el mes pasado, un aumento del 58.6% respecto al mismo periodo de 2011. Estos chequeos se llevan a cabo previo a la compra.
“Si tuviera mil AR-15 (rifle semiautomático similar al que presuntamente se utilizó durante la matanza en la primaria Newtown) podría venderlas en una semana”, dijo para el diario neoyorquino un vendedor de armas. “Cuando cierro, ellos tocan las ventanas para que los deje entrar (...) Ellos me muestran el dinero”.
Luego de la matanza de 20 niños y seis personas en una primaria en Newtown, Connecticut, el presidente Barack Obama anunció que respaldaría una propuesta para la prohibición de armas de asalto y designó al vicepresidente Joe Biden para que le presentara este proyecto en este mes.
Tras reuniones con la Asociación Nacional del Rifle (NRA), empresarios del mercado de los videojuegos, tiendas minoristas como Walmart, activistas, agencias policiales, organizaciones, expertos, y otros sectores de la sociedad, Biden dijo que el próximo martes enviaría las recomendaciones al mandatario estadounidense para formular medidas que logren frenar la violencia derivada de la venta de armas en el país.
La principal asociación proarmamentista, la NRA, salió decepcionada de estas reuniones con el vicepresidente, según publica en NYT.
“Nos decepcionó lo poco que se hizo en la reunión para mantener seguros a nuestros niños y lo mucho que hizo con una agenda para atacar la Segunda Enmienda”
En medio de estas negociaciones Biden dejó en claro que el presidente “está listo para actuar”, incluso, si no se llegara a un acuerdo, con una decisión ejecutiva.